El cementerio de Bobby

Tranquilo hermano, que no va por ti :-) Ésta te la dedico, que me acordé de ti cada vez que pasaba por delante de Bobby. Bobby fue un pequeño perro terrier, raza de perros reconocida por su tenacidad y su coraje. Perteneció a John, quien padecía de tuberculosis. John falleció el 15 de febrero de 1858 y fue sepultado en los terrenos adyacentes a la iglesia de Greyfriars, donde está tomada esta foto. Después de la muerte de su amo, Bobby pasó el resto de sus 14 años sentado sobre la tumba de su amo. Hiciera frío, lloviera o nevara, ahí estuvo Bobby, acompañando a su amo hasta en la muerte. Bobby de Greyfriars es uno de los símbolos de Edimburgo y por supuesto, tiene su propio pub. Todo lo importante de Edimburgo tiene su pub. Frente al pub de Bobby hay una estatua de bronce con la imagen del perrito. Es muy famosa. Bueno, la foto: No lleva virado ni tratamiento más allá de algo de niveles y corrección de la perspectiva. La luz era así. Os cuento otra curiosidad de la foto, es esa reja que se ve a nuestra izquierda. Hace años la medicina pagaba muy bien por los cadáveres para investigar con ellos y eso hizo que el saqueo de tumbas fuese una práctica habitual en los cementerios. Quienes no querían correr riesgos encargaban unas rejas como las que veis para evitar la exhumación. Otros iban más allá del robo de cadáveres y cuando estos escaseaban en los cementerios, se "fabricaban" sus muertos para poder venderlos. Como casi siempre en estos casos, vagabundos y prostitutas eran los más perjudicados. Algunos de estas historias de asesinatos se hicieron famosas y se cuentan en los tours turísticos que hacen por la ciudad de Edimburgo. Almu, ¿Todo correcto?